Plan de negocio para un gimnasio – Guía Bodytone

Si estás aquí, probablemente ronde por tu cabeza la idea de montar un gimnasio. Si eres un amante del deporte, el fitness y una vida saludable, déjanos decirte que es una gran oportunidad para ti. Emprender nunca es fácil, pero montar un gimnasio puede ser un negocio rentable si das los pasos adecuados. Por eso, antes de lanzarte a esta aventura, te invitamos a leer esta extensa guía de cómo realizar un plan de negocio para un gimnasio. Con ella, usarás herramientas que te harán pensar y analizar en profundidad si tu idea de negocio puede convertirse en algo sólido y viable.

Comenzarás definiendo tu modelo de negocio, analizando el mercado y quiénes serán tus competidores. Sabrás también elegir qué zona te conviene más para abrir tu centro y cómo realizar una buena planificación financiera y operativa.

Obviamente, esto no pretende ser un máster de negocios que te convertirá en todo un tiburón de las finanzas y del mercado del fitness, pero sí encontrarás algunas claves y, sobre todo, una guía práctica que te guíe en el proceso de apertura de tu futuro gimnasio. Nosotros ponemos las claves; el trabajo tendrás que hacerlo tú. 

¡Comencemos!

¿Qué es un plan de negocio?

Un plan de negocio es un documento que te ayuda a definir los aspectos clave de tu futuro negocio. Abarca cuestiones como el modelo de negocio en sí mismo, el mercado del sector, la competencia, el presupuesto, las proyecciones de ganancias y gastos… En definitiva, es un mapa que se trabaja para ayudarte a entender si la idea de negocio que tienes en mente es realizable y puede ser rentable. También te permite establecer una hoja de ruta, una estrategia sólida para hacer que ese negocio crezca.

La importancia de realizar un plan de negocios radica en la idea de poder tomar decisiones realmente informadas abarcando todos los aspectos que debes tener en cuenta antes de emprender. Eso te permitirá detectar riesgos y oportunidades, obtener financiación para tu gym, atraer inversores o socios, etc. En definitiva, un plan de negocio para tu gimnasio será un documento que te ayudará a transformar esa idea que tienes en la cabeza en un negocio real y de éxito.

Plan de negocios para abrir un gimnasio, paso a paso

Vamos a establecer un mapa de cuestiones a abordar en el plan de negocios de tu futuro gimnasio. Serán ocho puntos que tendrás que trabajar después en profundidad. Nosotros solo te damos los aspectos que debes tener en cuenta, pero tú eres el que maneja toda la información referente a tu idea de negocio. Esto te servirá para profundizar en ella.

Define tu modelo de negocio

¿Qué tipo de gimnasio quieres abrir? Tienes que definir el concepto de negocio de manera clara y entendible. “Un gimnasio” a secas, es un modelo de negocio poco definido. Debes profundizar más en el concepto: Un “gimnasio de crossfit enfocado a la competición”, un “gimnasio de alta gama con servicios exclusivos adicionales de pago por uso”, un “gimnasio especializado en actividades wellness como como yoga o pilates” o “un centro deportivo especializado en mejorar el rendimiento de deportistas profesionales”, son ideas más sólidas y aterrizadas. 

Trata de definir de manera concreta y específica tu modelo de negocio, bien sea en la oferta, en el precio, en el modelo de pago, en el público al que va dirigido… o en todos ellos.

Analiza el mercado y a la competencia

¿Ves? Como ya has definido tu modelo de negocio de manera clara y específica, ahora la competencia no parece tan grande. Gimnasios hay muchos, pero centros como el que has definido en el punto anterior… quedan menos. 

Ahora es el momento de conocer todo lo que puedas sobre los centros que realizan la misma actividad que tú. Eso implica muchos aspectos: Ubicación, número de socios, qué es lo que mejor hacen, qué cosas hacen ellos que te sería fácil mejorar, cuáles son las tarifas que cobran a sus empleados… será una manera de encontrar cuáles son los puntos débiles de tu gimnasio -sobre los que tendrás que trabajar-, y cuáles tus fortalezas -que deberás potenciar-. También te permitirá establecer el precio que podrás cobrar por la inscripción, en base al precio medio de tus competidores y a los servicios que vas a ofrecer.

También puedes hacer una valoración sobre la demanda que hay en la zona del servicio que vas a ofrecer. Algunas de estas cuestiones se pueden abarcar con informes oficiales de censo de población o datos de facturación de empresas (accesibles en portales de pago). Otros, sin embargo, se deben basar en la observación (perfil del habitante de una zona concreta, negocios alrededor, horarios de mayor y menor afluencia…).

Elige el lugar adecuado

Como ya conoces la oferta de tu modelo de negocio, y eres capaz de analizar a la competencia y la demanda de tu servicio, ya estás en disposición de elegir la zona adecuada donde abrir tu gimnasio. Debe ser un lugar estratégico que combine una alta demanda y una oferta insuficiente. También deberás encontrar un equilibrio entre la tarifa que podrás cobrar a tus clientes y el tamaño del local, que definirá el coste del alquiler o de su compra.

La elección del local estará estrechamente relacionada con el modelo de negocio que hayas establecido en el primer paso. Según el modelo de negocio, podrás tener un local más pequeño o irte a un modelo de gimnasio más grande y multitudinario.

Planifica el presupuesto y las proyecciones financieras

Aquí debemos ser muy meticulosos. Son los números los que marcan la viabilidad de un proyecto y su sostenibilidad en el futuro. Has de realizar un presupuesto detallado y realista para tu gimnasio. Eso implica tener en cuenta todos los costes derivados de la apertura y mantenimiento. Para ello, puedes consultar el post que hicimos donde hablamos de cuánto cuesta abrir un gimnasio.

Si ya has realizado un análisis completo de los gastos, tendrás ahora que hacer una proyección de los ingresos. Según la tarifa que pretendes cobrar, ¿cuántos socios necesitas para tu gimnasio? ¿Es un número realista? ¿El balance de gastos e ingresos con esos números da un saldo positivo que permita generar ganancias que hagan que merezca la pena el proyecto? ¿Puedes ser flexible con precios y número de socios en el caso de tener que aplicar un Plan B? ¿Es un modelo escalable que me permita obtener más ganancias conforme aumenta el número de socios, el personal y el tamaño de las instalaciones?

Por supuesto, sería muy normal que no tuvieras liquidez inicial para afrontar los gastos. Por eso, es importante saber cuál va a ser la fuente de financiación de tu proyecto. Para eso, te preponemos distintas alternativas para financiar un gimnasio en este otro artículo.

Planifica la adquisición del equipo

Es el momento de planificar la adquisición de todo el equipo. Esto implica todo: la obra de remodelación del local, el acondicionamiento, el mobiliario, las máquinas… En este punto podemos serte de mucha ayuda. Si estás pensando en montar un gimnasio, ponte en contacto con nosotros en nuestro apartado de gimnasios profesionales: Equipa tu gimnasio. 

Este apartado aborda aspectos materiales y también de personal. ¿Voy a necesitar ayuda en mi gimnasio? Un comercial, alguien para recepción, profesionales del fitness, nutricionistas… o incluso un asesor que te ayude con todas las gestiones legales y tributarias. Todas esas partidas debes tenerlas claras y saber quiénes serán tus proveedores o profesionales contratados. 

Diseña una estrategia de comunicación

¿Cómo vas a atraer a tus primeros clientes al gimnasio? ¿Y en el futuro? Este apartado incluye todas las acciones que vas a realizar para atraer y fidelizar a tus futuros socios: publicidad, promociones, eventos, trabajo comercial y de relaciones públicas… 

Nosotros podemos echarte una mano para arrancar en los primeros meses. Puedes descargar esta guía sobre acciones de marketing para arrancar con tu gimnasio. Son acciones que te permitirán empezar a ganar tus primeros clientes. Te recomendamos que lo tengas.

Elabora un plan de gestión

Lo tienes todo listo para poder arrancar y abrir tu nuevo gimnasio pero, ¿te has planteado cómo será el día a día? Este es el apartado para empezar a hacerlo. Debes diseñar un plan detallado de cómo será la gestión de tu gimnasio. Has de definir, primero, cuáles son las tareas derivadas de la actividad diaria que asegurará el buen funcionamiento del negocio: la gestión de caja, el registro de los socios, el modo de cobro, el acondicionamiento diario de las instalaciones, la limpieza, el asesoramiento a los clientes… 

Debes definir, no solo las tareas, sino también los procesos. ¿Cada cuánto se limpiarán las instalaciones? ¿Con qué herramienta voy a gestionar los cobros y los registros? ¿Qué haré con el dinero en efectivo cada día? ¿Cuál será el horario de apertura y cierre? ¿Y los turnos de mis trabajadores? Una vez definidas las tareas, debemos también definir roles y responsabilidades de cada miembro del equipo. 

En definitiva, se trata de decidir qué, quién, cuándo y cómo se hará cada una de las tareas necesarias para el buen funcionamiento del gimnasio. 

Ajusta el plan conforme avanzas

El plan de negocio para tu futuro gimnasio se basa también en la retroalimentación. Conforme vas avanzando en él, y el día a día te va mostrando la realidad, tendrás que tomar decisiones. Para ello, es fundamental un análisis constante de los resultados, mes a mes, y evaluando las acciones que se han realizado y el impacto que han tenido sobre el negocio. 

Esto permite que tu negocio se adapte a las circunstancias, desde previsiones que no se cumplen, estrategias que han dado un resultado que no esperabas (para bien o para mal) o cambios repentinos en el mercado. Recuerda que un negocio es un ente vivo y, si bien es cierto que es crucial tenerlo todo atado y planificado, también hay que ser flexible.